Pix.: 22992540111 (Qualquer ajuda é bem Vinda. Gratidão)
Inicio | Temas Bíblicos |Leia a Biblia Leia a Bíblia | Post´s em Espanhol |Doações |Contato
Esta é a vida eterna: que te conheçam, o único Elohim verdadeiro, e a Yeshua o Messias, a quem enviaste. JOÃO 17:3
faceicon
1a Corintios 9:27

1a Corintios 9:27 Si algún incrédulo os invita, y queréis ir, de todo lo que se os ponga delante comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia.

Interpretación tradicional: El creyente tiene libertad absoluta de comer de todo lo que se le ofrezca.

Verdadero entendimiento: Nuevamente, igual que en el análisis del versículo anterior, el tema no es la comida sino la idolatría. El creyente no debía indagar si la carne había sido ofrecida previamente en sacrificio a algún ídolo.

Comentario: Los creyentes en Corinto sabían que no había muchos dioses, ellos conocían Dt. 6:4 que dice que Dios es uno, que por lo tanto la creencia de una multitud de dioses era una falacia. Pablo, lo repetimos nuevamente, no está abrogando las leyes dietéticas, un mandamiento dado por Dios, no hay hombre que pueda abrogarlo. En ningún momento se dice aquí que se transgreda la dieta bíblica o se autorizando a hacerlo. Antes que nada el creyente debe considerar el aceptar o no una invitación tomando en cuenta que puede ser de tropiezo para él o para otros más débiles. En el caso de que se le ofreciera una carne, no debía preguntar si había sido sacrificada a los ídolos y antes de comerla considerar los dos requisitos: que estuviese permitido por la Palabra y orar por ella dando gracias a Dios (porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado 1ª Tim. 4:5).

Ahora, qué sucedería si se te ofrece algo que no está permitido por la Palabra pero sabes que el rechazarlo sería una ofensa muy grave, creo que yo no podría decirte qué sería lo mejor hacer, pero creo a expensas de lo que te dicte el Espíritu Santo que se debe considerar antes que nada la obediencia a lo que está Escrito y explicarle con amor y con la Palabra a la gente porque no se puede comer, pero si aún así no se puede hacer esto último, que sea por que realmente estamos aplicando la primera regla de interpretación que dicta que se puede dejar de obedecer un mandamiento con tal de cumplir uno más importante, evaluar las prioridades y si por rechazar esa comida puede ser que se cierren definitivamente las puertas para hablarle más de la Palabra entonces es mejor aceptarla, considerando que esa persona

114

poco a poco irá aprendiendo y se le podrá explicar acerca de lo que enseña la Biblia referente a la alimentación, “mejor es que se borre una letra de la ley y no que después sean borradas todas”.

Por último no podemos dejar de considerar lo que dicen los versículos 31 y 32 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios; no podemos pensar que transgredir lo que Dios nos dice en su Palabra concerniente a los alimentos le glorifique, además de que será de tropiezo sin duda para los judíos. No podemos decir “Señor espero que esta desobediencia a Tus mandamientos te glorifique y bendice estos alimentos” la desobediencia jamás va a glorificar a Dios.

 Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: 1a Corintios 10:25

1a Corintios 10:25 De todo lo que se vende en la carnicería, comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia;

Interpretación tradicional: El cristiano tiene completa libertad de comer absolutamente de todo.

Verdadero entendimiento: El contexto nos habla de un asunto de idolatría y no de la dieta bíblica. El creyente no debía preguntar si era comida kosher o no, sino que no preguntara si había sido sacrificada a los ídolos.

Comentario: Sabemos que el contexto socio-cultural de Grecia lugar en el que se ubica la ciudad de Corinto era que estaba plagada de idolatría, por lo que mucha de las carnes que se ofrecían a los dioses después se vendía en los mercados a los que asistían muchos creyentes. Pablo les dice que no pregunten sobre si esa carne fue o no sacrificada a los ídolos ya que

113

estos sabían que no eran absolutamente nada y no que preguntaran si eran alimentos kosher o no, él ya da por hecho que los corintios creyentes, fuertes en la fe, no van a transgredir las Escrituras que él mismo les había enseñado durante tanto tiempo. Sería ilógico que un creyente fuerte en la fe vaya a la carnicería a comprar algo que la Escritura dice que no se debe comer.

Aquí aparentemente Pablo está contradiciendo la ley pero recordemos la sexta regla de interpretación que dice que cuando un versículo de la Biblia contradice a otro tenemos que buscar un tercero que lo aclare. En este caso Pablo no está abrogando la ley sino habla de un asunto de comida sacrificada a los ídolos, les pide que aquellos que son fuertes en la fe, que conocen la Escritura y que saben que un ídolo nada es en el mundo coman con libertad de la carne que compran, obviamente alguien que conoce la Escritura, en aquel entonces el Antiguo Testamento, sabía perfectamente lo que podía comprar y lo que no ya que la ley le mostraba que era lícito delante de Dios.

 Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: Romanos 14:1-3

Romanos 14:1-3 Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones. Porque uno cree que se ha de comer de todo; otro, que es débil, come legumbres. El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.

Interpretación tradicional: Aquel que basa su dieta alimenticia de acuerdo a la ley de Moisés es débil en la fe, sin embargo no hay que juzgarlo.

Verdadero entendimiento: El débil en la fe aquí no es en referencia al que lleva una dieta kosher, sino aquel que no tiene conocimiento de la Escritura.

Comentario: El punto de partida es que no debemos de juzgar, para empezar por que entonces nosotros seremos también juzgados (Mt. 7:1) y porque con la vara que midamos seremos medidos.

Debido a que este tema compete sobre los débiles y los fuertes en la fe debemos definir quién es bíblicamente fuerte en la fe y quién es bíblicamente débil en la fe. Primero debemos entender cómo viene la fe, por el oír y el oír por la Palabra de Dios (Rom. 10:17). Entonces para Pablo y para los romanos alguien débil en la fe era aquel que no conocía el Antiguo Testamento. Alguien que conoce la Biblia no puede ser considerado en ningún momento como débil en la fe, sino lo opuesto es toda la verdad ya que el conocimiento de la Escritura nos va a librar de pecar, nos va servir como instructivo en nuestra vida, nos va a ayudar a discernir entre lo bueno y lo malo, nos va a conducir a hacia la madurez y santidad, no va a dejar que

112

nos guiemos por los instintos y los sentimientos, etc., etc. Entonces alguien que en tiempos de Pablo conocía la ley sabía perfectamente que no se podía comer todo lo que se moviera y que eso no es sinónimo de fortaleza, eso no podía glorificar a Dios.

Generalmente se entiende aquí que el que come legumbres es débil en la fe por encontrarse esclavizado todavía bajo la ley mosaica, sin embargo si aceptamos esto, también ¡debemos aceptar que Daniel era débil en la fe!, lo cual a mi parecer no es posible, no es posible considerar como débil a Daniel ya que conocía las Escrituras, era un hombre de oración, íntegro en todos sus caminos delante de Dios, Daniel es uno de los escasos personajes en la Biblia de quien no se hace ninguna referencia negativa. Daniel rechazó la comida del rey, no sólo porque probablemente era comida sacrificada a ídolos, sino porque seguramente eran alimentos prohibidos por la ley y pidió comer sólo agua y legumbres (Dn 1:10-16), dándonos ejemplo de lo que es la fortaleza espiritual y no contaminarse.

Pero entonces porqué aquí dice que alguien que come legumbres es débil, si ya vimos que Daniel no era débil y que alguien que no conoce la Biblia es débil, debemos entender qu en Roma había una mezcla de judíos y gentiles que se estaban incorporando a la iglesia, estos últimos traían aún muchas ideas filosofías. Había quienes eran vegetarianos por estar “en armonía con la naturaleza” como hoy es el “new age” y no por guardar la ley sino por ser parte de la nueva era o por un falso ascetismo religioso. Esto también nos enseña que al guardar la ley debe ser por motivos puros y acorde a la Palabra.

Otra posible explicación a este punto, es que así como en el verso 6 la frase y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace, es una añadidura a la carta de Pablo, una posibilidad es que las palabras que es débil, que se encuentra entre un par de comas, no hayan sido escritas por Pablo sino añadidas por algún escriba posteriormente que debido a la teología católica que argumenta que la ley no tiene ninguna relación con el cristiano pudo entender aquí que quien guarda la ley es débil. Porque son estas tres palabras (que es débil) las que cambian todo el sentido del texto, que bien podría decir “2Porque uno cree que se ha de comer de todo; otro, come legumbres.

Un fuerte en la fe es alguien que conoce las Escrituras para poder discernir entre lo que es correcto e incorrecto

Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: 1a Timoteo 4:1-5

1a Timoteo 4:1-5 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad. Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias; porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

Interpretación tradicional: Al final de los tiempos habrá muchos que dejando la sana doctrina impondrán abstenerse de ciertos alimentos que Dios creó y que son buenos y que pueden consumirse santificándolos con la Palabra y la oración.

Verdadero entendimiento: Pablo no le dice a Timoteo que por cuanto todo lo que Dios creo es bueno se debe de consumir, sino que el requisito para comer algo es dar gracias a Dios por ello, orar por los alimentos y que éstos estén permitidos por la Palabra, que en este caso es la ley.

Comentario: Estos versos son usados para atacar a quienes desean enseñar el seguir una dieta bíblica, cuando el texto nos muestra algunas características importantes que no se pueden desligar. Primero, este tipo de personas han apostatado de la fe, ¿qué es esto?, que se desviaron de la Palabra de Dios, que para Timoteo y para Pablo era únicamente el Antiguo Testamento, esto quiere decir que toda doctrina que no se apega o está acorde a lo que enseña el Antiguo Testamento no es sana doctrina, una doctrina basada únicamente en porciones de la Biblia y no en todo ella no es sana doctrina. Segundo, esta clase de personas no dice que además de ser hipócritas tendrán la conciencia cauterizada, es decir estarán tan endurecidos en sus razonamientos que no habrá nada que les haga cambiar de opinión. Tercero, una característica importante de esta clase de gente será que prohibirán casarse, enseñaran el celibato, que aunque en la iglesia católica el casamiento es uno de los siete sacramentos, el celibato sacerdotal es considerado como un grado de mayor espiritualidad y un requisito obligatorioll para todo aquel que quiera disponer su vida al servicio de Dios, son estos los que mandarán abstenerse de algunos alimentos como el caso de la tan conocida cuaresma. Son esta clase de personas y no quienes intentan enseñar los principios bíblicos de Levítico quienes mandan no comer cierta clase de alimentos.

Todos sabemos que toda la creación original de Dios era buena como lo manifiesta Génesis, esto nos enseña que nada es inmundo en si mismo, es decir nada es impuro por el simple de hecho de existir, por ejemplo, un camello no es inmundo por si mismo, simplemente no es alimento, no fue creado para comerse por el hombre, no porque la Palabra determine que algo es inmundo quiere decir que no sirva, que no tenga un uso o un propósito; las lombrices

110

de tierras son animales que en su apariencia no son muy agradables pero crean surcos en el interior de la tierra para que el agua pueda llegar hasta las raíces de las plantas, no son comestibles, son “inmundos”, pero tienen un gran propósito de existir y son una bendición para el cultivo. Todas las cosas creadas por Dios tienen una razón de ser. Dios determinó que se debía comer y que no, no por querer hacer la vida más difícil o querer limitarnos, sino porque Él creó nuestro organismo y sabe que es lo que necesita y que le puede hacer daño. Él no quiere arriesgar que sus hijos se enfermen o tengan problemas de salud. Dios desea que todos gocen de una buena salud ya que esta se reflejará incluso en nuestra relación espiritual.

El verso tres nos enseña algo muy importante, dice que algunos intentarán o evitaran que muchos creyentes y quienes han conocido la verdad participen de algunos alimentos. Aquí debemos detenernos y entender bíblicamente qué es la verdad, ya que es un término muy ambiguo y que se presta a muchas interpretaciones, pero que sea la misma Biblia quien no lo muestre, veamos lo que dijo Jesús en Jn. 17:17 Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.” A qué “palabra” se refiere Jesús, pues al Antiguo Testamento y si deseamos ser más específicos a la ley, aquí nuestro Maestro nos enseña que es la Palabra la que nos santifica de este mundo; ahora veamos lo que dice el Antiguo Testamento confirmando lo que estaba orando Jesús en ese momento; el Salmo 119:160 “La suma de tu palabra es verdad”, nuevamente a qué “palabra” se refiere el salmista, qué entendían los lectores de este salmo cuando leían este verso y en general todo el Salmo 119, la respuesta es nuevamente a la ley que Dios le dio a Moisés, confirmando con esto a la perfección las palabras de Jesucristo; y por último del mismo Salmo 119 el verso 142, “tu justicia es justicia eterna y tu ley, la verdad”, el texto no necesita prácticamente interpretación, la palabra que se usa para traducir ley es la palabra hebrea torá, es completamente literal lo que nos expresa David, es la ley de Dios la verdad, la que nos santifica y la que nos muestra que es permitido y que no lo es. Así que retomando la explicación de todo este pasaje ahora entendemos mejor porque esta clase de hombres habían abandonado la fe, por haberse apartado de la verdad, del Antiguo Testamento y de la ley de Dios por ende, y deseaban que los verdaderos creyentes les siguiesen en esa falsa ascética demoníaca.

El papel de la oración al comer es muy importante no sólo porque es lo que nos puede diferenciar entre otras cosas de los animales, es la forma como le agradecemos a Dios el sustento y nos ayuda a recordar y discernir qué es lo que enseña la Palabra sobre que podemos comer y que no. Pero orar sólo por los alimentos no los va a transformar mágicamente como supuestamente los sacerdotes “transforman la ostia en el cuerpo de Cristo”, al sentarnos a comer no podemos dejar a un lado la Biblia, nuestras creencias se deben ver reflejadas en absolutamente todas las áreas de nuestra vida. Son dos requisitos para que algo sea considerado limpio o santificado para su consumo, la Palabra y la oración (v.5), si la Escritura enseña que algo es limpio no importa en que época del año nos encontremos o la opinión de otros, ese alimento es apto para el consumo y punto. Están los judíos ortodoxos, que no comen carne y lácteos juntos, debido a la interpretación de Éxo. 34:26, hay quienes incluso los colocan en refrigeradores separados y no es que esto esté mal, el problema empieza cuando se empieza a mandar a otros que deban hacerlo o prohibir a aquellos que están comiendo de tal mezcla, cuando el mandamiento no expresa tal cosa.

Hay quienes opinan respecto a las leyes dietéticas que marca la Biblia, que fueron dadas como medidas preventivas para los israelitas cuando iban a entrar a la tierra de Canaán ya que en esa región las naciones paganas de esa época no tenían ningún tipo de higiene y que la conservación de muchas carnes al no haber refrigeradores era prácticamente nula. Esto es ridículo ¡como si Dios no supiese que un día se iba a inventar el refrigerador!. Hemos visto

111

que su Palabra es inmutable ya que Él es el mismo por los siglos de los siglos, no está limitada hasta la invención de determinados aparatos domésticos, ahora resulta que es el refrigerador y no Su Palabra eterna la que dictamina que si se puede y que no se puede comer. Debemos dejar a un lado la fe superficial y hacerla práctica, tangible y parte de nuestro diario vivir. La fe viene por el oír, y el oír por la Palabra de Dios entonces debe ser la Palabra de Dios la que mande en nuestras vidas y no nuestros antojos o costumbres. Es cierto que en un país como el nuestro no es fácil obedecer a Dios en esta área que tanto trabajo nos cuesta, pero debemos confiar en la fortaleza de Su Espíritu para no dejarnos dominar por lo que nos pide el cuerpo y tomemos el compromiso con Dios como lo hacía Pablo.

1a Cor. 9:24 – 27 24¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis. 25Todo aquel que lucha, de todo se abstiene [así como un atleta que se prepara para las Olimpiadas no come lo que sea, sino que lleva una dieta especial, de la misma manera tu y yo, siendo un pueblo especial nos tenemos que preparar en todos los sentidos para la lucha espiritual que afrontamos día a día]; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible. 26Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, 27sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, [no dejarnos dominar por nuestro cuerpo, por nuestro paladar] no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado.

 Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

Tags: Marcos 7:18-23

Marcos 7:18-23 El les dijo: ¿También vosotros estáis así sin entendimiento? ¿No entendéis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar, porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale a la letrina? Esto decía, haciendo limpios todos los alimentos. Pero decía, que lo que del hombre sale, eso contamina al hombre. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez. Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

Entendimiento tradicional: Jesús está enseñando a sus discípulos que todo es puro cuando se trata de decidir lo que se puede comer y que las verdaderas cosas impías proceden del corazón del hombre.

Verdadero entendimiento: Jesús no está determinando que ahora todo hombre es omnívoro. Jesús está empleando el uso de los alimentos limpios para mostrar que es más importante tener un corazón limpio delante de Dios.

Comentario: Después de los análisis que hemos hecho sobre la bendición que implica el guardar la ley, realmente crees qué Jesús está de pronto aquí declarando que podemos comer todo sin tomar en cuenta qué es. Desglosemos este capítulo tan interesante para llegar a entender qué realmente quiso enseñar nuestro Santo Maestro.

1Se juntaron a Jesús los fariseos, y algunos de los escribas, que habían venido de Jerusalén; (fariseos, personas que eran observantes devotos de la ley y de las costumbres establecidas, aunque muchos de ellos con un corazón contaminado, venían del lugar donde estaban establecidas las principales escuelas rabínicas, Jerusalén el principal centro religioso de la época.)

2los cuales, viendo a algunos de los discípulos de Jesús comer pan con manos inmundas, esto es, no lavadas, los condenaban. (este punto es muy importante, condenaban a los discípulos no por lo que comían, sino por cómo comían, el texto no dice que estaban comiendo animales prohibidos señalados en Levítico 11, sino pan, esto nos empieza a mostrar el tema de este pasaje que no son los alimentos, si hubiesen estado violando directamente Levítico 11 se lo hubiesen mencionado de inmediato a Jesús.)

3Porque los fariseos y todos los judíos, aferrándose a la tradición de los ancianos, si muchas veces no se lavan las manos, no comen. 4Y volviendo de la plaza, si no se lavan, no comen. Y otras muchas cosas hay que tomaron para guardar, como los lavamientos de los vasos de beber, y de los jarros, y de los utensilios de metal, y de los lechos. (aquí nos muestra el tema del capítulo, aferrarse a la tradición como si fuese decreto de Dios, los fariseos se lavaban las manos varias veces antes de comer, o como dice el interlineal griego,a 107 kk Lacueva, Francisco, Op. Cit., p. 166.

no ser que hasta el codo se laven las manos no comenkk, como en el caso del día de reposo, nuevamente tenemos una diferencia de interpretación ahora sobre cómo comer. Fue el rabino Shamai quien enseñó que había que lavarse tres veces cada mano antes de comer y que de no hacerlo aunque la comida fuera bíblicamente permitida ya no era limpia o kosher debido a no cumplir el lavamiento de las manos como él lo había determinado. Ellos [los fariseos] eran demasiado meticulosos en su higiene al comer, el problema no es ser meticulosos al lavarnos las manos, ya que el sentido común nos dice que debemos de hacerlo antes de comer si no queremos enfermarnos, sino que estaban haciendo de esa meticulosidad una imposición sobre otros, esta forma de lavarse las manos llevaba tantos años realizándose que se había convertido en una tradición a tal grado que en cuanto veían a otros no hacerlo los condenaban, se estaban como dice el texto aferrándose a estas tradiciones, que como vimos al inicio del libro son conocidas como minjagim que aunque tiene un valor legal jamás pueden estar por encima del espíritu de la ley, la cual fue dada para beneficio del hombre y no para que sea una carga.)

5Le preguntaron, pues, los fariseos y los escribas: ¿Por qué tus discípulos no andan conforme a la tradición de los ancianos, sino que comen pan con manos inmundas? (los fariseos y escribas cuestionan por que no seguían la tradición de lavarse las manos como ellos lo solían hacer, para ellos no era sólo la cuestión de lavarse las manos, sino el hacerlo como ellos determinaban que debía de hacerse, de no hacerse como ellos decían entonces no se tenían aún las manos limpias. Este verso vuelve a mostrar que los discípulos estaban comiendo pan.)

6Respondiendo él, les dijo: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo de labios me honra, mas su corazón está lejos de mí. (Jesús generalmente contestaba a los que conocían la Escritura con la Escritura, los acusa de aparentar algo que no son [hipócritas], cosa que no era nuevo ya que Isaías lo había predicado mucho antes, y muestra la enseñanza que quiere enfatizar, el honrar a Dios con corazón puro y limpio.)

7 Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas mandamientos de hombres. (servir a Dios debe estar en armonía y ser congruente con lo que Él ha determinado en Su Palabra. Aquí nos muestra el centro del problema: enseñar las tradiciones [los mandamientos de hombres] como si fuesen doctrinas de Dios. Primero está la necesidad de la gente, el comer si tenían hambre, que la tradición de lavarse las manos de determinada manera. En cualquier iglesia podemos caer en el error sin darnos cuenta de enseñarle a la gente alguna tradición o costumbre como si fuese la Palabra de Dios, de menospreciar o juzgar a quienes no realizan el culto o la alabanza como nosotros lo hacemos, de condenar a quienes no oran como nosotros pensamos que se debe hacer y no como dice la Escritura, etc.)

8Porque dejando el mandamiento de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres: los lavamientos de los jarros y de los vasos de beber; y hacéis otras muchas cosas semejantes. (esto es la gravedad: dejar el mandamiento de Dios, el cual es inspirado y divino, no así las muchas tradiciones de los hombres.)

9Les decía también: Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición. (ahora les va a poner un ejemplo real de esa época sobre como no les importaba invalidar el mandamiento de Dios con tal de guardar su tradición. El problemas no son los mandamientos de Dios sino el sustituirlos por la tradición.)

108

10Porque Moisés dijo: Honra a tu padre y a tu madre; y: El que maldiga al padre o a la madre, muera irremisiblemente. 11Pero vosotros decís: Basta que diga un hombre al padre o a la madre: Es Corbán (que quiere decir, mi ofrenda a Dios) todo aquello con que pudiera ayudarte, 12y no le dejáis hacer más por su padre o por su madre, 13invalidando la palabra de Dios con vuestra tradición que habéis transmitido. Y muchas cosas hacéis semejantes a estas. (al decir “Moisés dijo” significa que es la Palabra de Dios, la cual debe tener absoluta autoridad en materia doctrinal o teologal. Un hombre podía ofrecer al templo todo lo que ganase, sin embargo esto no podía estar por encima del honrar a sus padres, sostenerlos y ayudarlos cuando éstos no pudiesen hacerlo, así que debido a la corrupción existente en el templo, habían impuesto que si un hombre había ofrecido esto no se podía retractar y debía decirle a sus padres que todo lo que tenía era una ofrenda para Dios, rehusando así a ayudarlos y limpiando su conciencia pensando que lo hacían para Dios.

14Y llamando a sí a toda la multitud, les dijo: Oídme todos, y entended: 15Nada hay fuera del hombre que entre en él, que le pueda contaminar; pero lo que sale de él, eso es lo que contamina al hombre. 16Si alguno tiene oídos para oír, oiga. (nada de lo que entre en el cuerpo que Dios ya haya limpiado por medio de Su Palabra, ese alimento aun con manos “inmundas” [inmundas de acuerdo a los fariseos] no va a contaminar al hombre, sino lo que sale de un corazón hipócrita delante Dios. Para el corazón inmundo todo le es inmundo y contaminado. Tampoco quieren decir estos versos que Jesús no se lavara las manos antes de comer.)

17Cuando se alejó de la multitud y entró en casa, le preguntaron sus discípulos sobre la parábola. 18El les dijo: ¿También vosotros estáis así sin entendimiento? ¿No entendéis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar, 19porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale a la letrina? Esto decía, haciendo limpios todos los alimentos. 20Pero decía, que lo que del hombre sale, eso contamina al hombre. (La verdadera inmundicia no es la que se manifiesta en nuestro hombre exterior, sino la que se esconde en nuestro hombre interior. Esta se manifiesta, no por la manera en que los alimentos entran en nuestra boca, sino por la realidad interior de nuestro corazón. Jesús no está enseñando tampoco que no tenemos necesidad de lavarnos las manos antes de comer sino revela la importancia de no perder de vista la realidad de la fuente de una contaminación mucho más seria y profunda que solamente puede ser resuelta, no por el ritual de una purificación exterior, sino por la acción de la Palabra en el corazón del hombre. Así que al hacer puros todos los alimentos aquí Jesús no está autorizando a partir de ese momento el tener una “orgía alimenticia” considerando que la purga que genere el cuerpo lo va a limpiar, sino que estos alimentos al estar de acuerdo a la Palabra y por medio de la oración quedan santificados, tal y como lo decreta 1ª Timoteo 4:5 que será el análisis del siguiente versículo para confirmar este pasaje.

Por último, si tomamos esto literal, qué debemos entender por “hacer puros todos los alimentos”, que entonces no hay excepciones, que el ser humano puede consumir todo lo que se encuentre en el reino animal y vegetal. Entonces podríamos argumentar que consumir marihuana, un producto natural, no está mal, que la sociedad internacional protectora de animales está mal por condenar a los coreanos y a los chinos por comerse a los perros y a los gatos, que por lo tanto ya que todo es limpio puedo consumir de todo, el único freno a considerar es que no todo me conviene (1ª Cor. 6:12).

109

ll Samuel Albert, Para Comprender las Religiones en Nuestro Tiempo, España, Edit. Verbo divino 2ª edición, 1989, p. 128.

*  Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: Colosenses 2:20-23

Colosenses 2:20-23 Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques (en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso? Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.

Entendimiento tradicional: Para quien vive en Cristo no hay “tabu”, que pueda hacerle bien o maljj. En su libertad en Cristo puede decidir comer o hacer lo que quiera y no verse sometido a imposiciones de la ley o de otras doctrinas que lo quieran esclavizar.

105

Verdadero entendimiento: Quien verdaderamente ha muerto con Cristo a los principios de este mundo, no se rige por imposiciones o mandatos de hombres opuestos a la Palabra de Dios, la cual contraria a estas doctrinas humanas, permanece eternamente.

Comentario: Este versículo es usado para criticar o “etiquetar” como débil a quien rige su dieta de acuerdo a lo establecido en la Escritura, pero en este pasaje de ninguna manera se refiere a este tipo de personas, sino lo opuesto es la verdad. Nos habla de aquellos que apegándose a doctrinas del mundo, no de Dios, someten su cuerpo a una dura disciplina física intentando con ello un cambio espiritual.

Colosenses 2:21 nos enseña que las naciones paganas, de las que procedían los creyentes que no eran judíos, tenían muchas extrañas ordenanzas legalistas acerca de los alimentos. Había normas según las cuales no se podían tocar esos alimentos (los sacrificados a deidades paganas, no se podía comer ni probar los alimentos que habían sido reservados a una deidad pagana que necesitaba alimento por si en un momento determinado, en el futuro, tenía hambre) y le apetecía aquella comida. Pablo está pidiendo a los discípulos de Colosas que no adopten estas leyes paganas acerca de comer ciertos alimentos. Y de acuerdo al contexto deja muy claro que estas reglas dietéticas no son “las verdaderamente importantes” sino las que hallamos en Levítico 11, las primeras eran leyendas y tradiciones de hombres que acabarían de morir como aquellos que las inventaron. Sinceramente crees que Pablo alguien que como hemos visto vivía de acuerdo a la ley, la llamaría algo inventado por el hombre. Tendría lógica y congruencia con el resto de la Biblia, la cual es una, indivisible.

Como podemos ver esta estrategia es usada o mejor dicho inspirada por Satanás para confundir a los más posibles, imitar las reglas de Dios y de esta manera mezclar la verdad con la mentira. A cuántos “ monjes naturistas” conoces que están mezclados en diversas creencias filosóficas-religiosas, y no es que el ser naturista sea malo, al contrario. Sino que se someten a cierta disciplina aparentando una falsa espiritualidad para lograr un mayor acercamiento a “dios” y un alejamiento del mundo contaminado, a muchos más esto les parece muy sabio y digno de admirarse (como lo dice el v. 23). O a cuántos no vemos cada año flagelando su cuerpo en alguna procesión o “manda” , como si con eso fuesen a someter sus apetitos carnales. No es nuevo que el hombre desee imponer cargas sobre otros respecto a su alimentación y su vida más de lo que está en la Palabra de Dios o lo peor de todo, que ni siquiera está establecido en Ella. Todos los preceptos del v.21 tocar, comer, o tomar no son alusiones a la ley bíblica sino a doctrinas humanas.

Previamente el apóstol les había mandado que nadie les juzgase por lo que comiesen o bebiesen que estuviera acorde a lo que dicta la Escritura, hay dos requisitos de acuerdo a 1ª Timoteo 4:5 para poder comer o beber algo (el análisis de este pasaje se encuentra posteriormente), si está dentro de estos dos lineamientos establecidos por Dios, nadie tiene el derecho de juzgarte por lo que comes o bebes.

Para concluir este análisis, la palabra usada en el versículo 20 “preceptos” es la palabra gr. dogmatizo (Strongs No. 1379) derivada de la palabra gr. dogma (Strongs No. 1378) que como vimos en el análisis del pasaje de Hechos 15, son mandamientos, enseñanzas de hombre y no de Dios. Por lo que no debemos de ninguna manera asociar este pasaje con la ley bendita de Dios.

Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

Tags: Hechos 10:9-15

Hechos 10:9-15 Al día siguiente, mientras ellos iban por el camino y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea para orar, cerca de la hora sexta. Y tuvo gran hambre, y quiso comer; pero mientras le preparaban algo, le sobrevino un éxtasis; y vio el cielo abierto, y que descendía algo semejante a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra; en el cual había de todos los cuadrúpedos terrestres y reptiles y aves del cielo. Y le vino una voz: Levántate, Pedro, mata y come. Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás. Volvió la voz a él la segunda vez: Lo que Dios limpió, no lo llames tú común.

Entendimiento tradicional: Ahora el creyente del Nuevo Pacto puede disfrutar de toda clase de alimentos ya que el Señor mismo los ha limpiado haciéndolos puros.

Verdadero entendimiento: En este pasaje jamás se habla que Dios cambie las instrucciones que Él mismo había dado previamente, Pedro es comisionado a hablarle a los gentiles sin ningún prejuicio acerca del evangelio ya que ahora el Señor los ha limpiado para recibir la Palabra de salvación para todas las naciones.

Comentario: Este pasaje es muy importante porque marca un antes y un después en la vida no sólo de Pedro sino de toda la Iglesia, hasta este momento la predicación del evangelio se había dado mayoritariamente, por no decir únicamente, entre grupos judíos y no realmente entre los gentiles, es en este capítulo en el que se da el primer contacto directo entre grupos de creyentes judíos y gentiles después de la ascensión de Jesús y que después sería el común denominador al incorporarse Pablo al cuerpo de creyentes. El comisionado para esto es Simón,

102

al que se le había dicho que se le darían las llaves del reino, al que Jesús había puesto por sobrenombre Pedro y le llamaba Simón hijo de Jonás, dando con esto también a entender el rol profético que tendría en el ministerio.

Debemos entender primero porqué a Pedro es dada esta visión para comprender porque este pasaje es una metáfora sobre los gentiles y gente de toda tribu, lengua y nación y no sobre los alimentos. Como previamente mencionamos a Pedro se le decía Simón hijo de Jonás, y no porque su padre se llamara así, sino porque su misión sería semejante a la que tuvo el profeta Jonás, como datos interesantes en este capítulo encontramos a Pedro en el mismo lugar donde se encontraba Jonás cuando huyó después de ser comisionado para llevar la salvación a los gentiles asirios (Jope) un puerto por el que ingresaba todo tipo de pescados a Israel; ambos eran galileos; así como Jonás resistió durante un tiempo ese llamado debido a sus prejuicios, lo mismo sucede con Pedro en esta visión; ambos estaban siendo llamados a predicar las buenas nuevas al imperio y las personas que en ese momento los tenían en opresión, los asirios por una parte y los romanos en el caso de Pedro. Entendiendo que la comprensión de la Biblia tiene que ir más allá del sentido literal y que el uso de alegorías respecto a un personaje se usan para entender la misión de otro es común como el caso de José el hijo de Jacob nos muestra en muchas maneras la vida de Jesús, de la misma forma la vida de Jonás nos apunta lo que sería esta misión específica de Pedro.

Ahora bien, el nombre Pedro en el griego Petros significa piedra o piedrecita, pero en hebreo “el rompimiento”, pues se dice que todos los primogénitos pether (abren o rompen) las matrices en Israel, así cuando Jesús le dice que él es Pedro (Mt. 16:18) le está diciendo que el sería el primero o el que abriría las puertas del evangelio a los gentiles de una forma como nunca antes se había visto y no que sería el primer Papa católico. Es por ello que a él específicamente se le da esta visión. También Jesús le dijo que le daría las llaves del reino (Mt. 16:19), indicando con esto no que él sería el poseedor de la salvación y su representante en la Tierra como interpreta la tradición católica, sino que él abriría la puerta del reino para que a partir de aquí todos aquellos que deseen entrar lo hagan sin importar si se trata de gentiles o judíos. Jesús le dijo que también sería pescador de hombres (Mt. 4:19) y es en Hechos 2 en Pentecostés donde comienza a ejercer este “nuevo oficio”, el Señor tenía planeado extender esta “pesca” ahora con el pueblo gentil, tal y como lo había hecho Él mismo previamente en varias ocasiones (Mt. 8; 15:21-28).

De esta manera podemos comprender un poco mejor esta visión simbólica, ahora, ¿porqué se le muestra esta visión acerca de los gentiles empleando animales de toda clase? Porque desde la perspectiva bíblica alguien que no tiene instrucción acerca de Dios, conocimiento de la Palabra es como una criatura que simplemente es gobernada únicamente por sus instintos, sus emociones y no en obediencia a su Amo y Señor. Una alegoría de una representación de los gentiles así la tenemos en Jeremías 31:27 cuando dice que sembraría la casa de Israel y la casa de Judá de simiente de hombre y de simiente de animal, esto significa que iba a llegar un momento que la casa de Israel al alejarse tanto de los caminos de Dios, al mezclarse entre las naciones serían como animales y la Iglesia sería formada por gente de toda clase de naciones debido a la santificación que ahora (Hechos 10:15) el Señor a través del sacrificio de su Hijo ya había hecho. También los animales que se salvan junto con Noe son representantes de aquellas naciones que sobrevivan de la tribulación y entren al milenio junto con la Iglesia.

Toda esta clase de cuadrúpedos, reptiles y aves representan a todas las gentes de todas las naciones y se le muestra con la indicación de que comiera en el sentido más simple porque Pedro tenía hambre y el Señor muchas veces nos enseña a través de las formas más simples y

103

cotidianas posibles. Pero profundizando en lo que implica el comer en tiempos del primer siglo entenderemos que comer con alguien no sólo era compartir los alimentos sino tener comunión y formar parte de él. Llegando a una profundidad mayor en la interpretación, el lienzo para algunos simboliza un talit o manto de oración que en sus cuatro esquinas contiene los llamados tzit-tzit que representan la ley de Dios, dando con esto a entender que ahora los gentiles pueden tener acceso a todas aquellas bendiciones y preceptos de la ley y forman parte del pueblo de Dios cuya mayor herencia es precisamente la Torá de Dios. A partir de ese momento Pedro y el resto de los discípulos debían ver a los gentiles no como extranjeros o advenedizos sino como conciudadanos de los santos y viceversa.

Algo a destacar que muchas veces pasamos por alto es que esto fue una visión y no algo “literal”, es decir, sólo fue una visión no la realidad, Pedro jamás mató a alguno de estos reptiles o cuadrúpedos y se los comió, ni hay una evidencia de que lo haya hecho después (incluyendo el pasaje de Gal. 2:1-16) simplemente Dios uso esta enseñanza para mostrarle una verdad mayor.

Hay quienes quedándose hasta el verso 15 insisten en que Dios sí le está diciendo a Pedro que ya puede comer de todo, pero resulta que ¡ni el mismo Pedro entendió la visión en ese momento! v.17 “y mientras Pedro estaba perplejo dentro de sí sobre lo que significaría la visión que había visto, he aquí los hombres que habían sido enviados por Cornelio, los cuales, preguntando por la casa de Simón, llegaron a la puerta”. No podemos hacer deducciones sin considerar el contexto. Pero dejemos que la misma Escritura nos muestre el significado de esta visión, del verso 27 en adelante:

27Y hablando con él, entró [Pedro], y halló a muchos que se habían reunido. 28Y les dijo: Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón judío juntarse o acercarse a un extranjero; [recordemos aquellas medidas impuestas para evitar transgredir algunos mandamientos llamados tacanot, pag. 33, conocidas por todo judío] pero a mí me ha mostrado Dios que a ningún hombre llame común o inmundo [¿en qué momento le dice Dios esto? Se lo dice en el verso 15, indicándoselo respecto a los animales de la visión, nunca de las personas, pero aquí Pedro ya empieza a darse cuenta que la visión no tenía que ver con alimentación sino con personas, los animales que vio son personas]; 29por lo cual, al ser llamado, vine sin replicar. Así que pregunto: ¿Por qué causa me habéis hecho venir? [Pedro entendía el significado de la visión no así del todo el propósito]

30Entonces Cornelio dijo: Hace cuatro días que a esta hora yo estaba en ayunas; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, vi que se puso delante de mí un varón con vestido resplandeciente, 31y dijo: Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus limosnas han sido recordadas delante de Dios. [como vemos Cornelio era un gentil temeroso de Dios y creyente en el único Dios verdadero] 32Envía, pues, a Jope, y haz venir a Simón el que tiene por sobrenombre Pedro, el cual mora en casa de Simón, un curtidor, junto al mar; y cuando llegue, él te hablará. 33Así que luego envié por ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado.

34Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, [“en verdad comprendo” es en este momento cuando le queda completamente claro el significado y el propósito de haber tenido esa visión: que Dios no hace acepción de personas] 35sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia. 36Dios envió mensaje a los hijos de Israel, anunciando el evangelio de la paz por medio de Jesucristo; éste es Señor de todos.

104

jj Henry, Matthew, op. cit., p. 1713.

Y la evidencia más grande de que Dios estaba respaldando estas acciones fue que recibieron el Espíritu Santo como sello de la presencia de Dios en sus vidas (v.44-46). Recordemos que en ese momento sólo los judíos habían recibido el bautizo en el Espíritu, por lo que estamos ante una nueva forma de conversión nunca antes vista, por medio de los meritos y las virtudes de Jesús, es por ello que los que habían acompañado a Pedro quedaron atónitos al ver todo eso. Ahora por medio de Jesús todos los creyentes de origen gentil podían ser parte del pueblo de Dios y el bautizo en el Espíritu era la evidencia más grande que respaldaba que ya no se les debía tratar como a otro pueblo y que no había necesidad de una serie de pasos para llegar a la conversión, como se había hecho durante muchos años. Ahora un gentil pasaba de ser un simple temeroso de Dios o prosélito a ser un hijo de Dios con los mismos derechos y privilegios que cualquier otro. Ahora Jesús había circuncidado el prepucio de su corazón.

Así que fue Pedro quien abrió las puertas del reino de Dios para todo aquel que le teme y hace justicia, por ello se le dieron las llaves del reino (Mt. 16:19). Pedro no podía “repartir Biblias” como quizá se haría hoy en día para que un “gentil” conozca a Dios y a Jesucristo, así que tendría que haber una relación a partir de ese momento entre gentiles y judíos muy estrecha para aprender de Dios, pero debido a los prejuicios existentes por parte de muchos judíos (el mismo Pedro Hch. 10:28; Hch. 11:1-3) como queda evidenciado al llevar Pedro seis testigos a casa de Cornelio, Dios debía mostrarles con hechos que Él tenía más pueblo de lo que creían (Hch. 11:17,18). Dios no estaba removiendo o cambiando de opinión respecto a lo que había dicho antes respecto a las leyes dietéticas, lo que estaba cambiando eran las actitudes que no eran limpias o “kosher” respecto al resto de las naciones que habían dejado de ser impuras por la fe en la sangre de Jesucristo.

*   Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: Tito 3:9 Pero evita las cuestiones necias.

Tito 3:9 Pero evita las cuestiones necias, y genealogías, y contenciones, y discusiones acerca de la ley; porque son vanas y sin provecho.

Entendimiento tradicional: Debido a que la ley no está vigente en la vida del creyente, discutir a cerca de la ley es vano y sin provecho.

Verdadero entendimiento: Tito era un joven que Dios había levantado como pastor de una congregación, como tal, estaba expuesto a muchas dificultades propias del ministerio, entre ellas caer en discusiones sin sentido sobre las interpretaciones de la ley. Esto no significa que el discutir sobre la ley sea infructuoso, todo depende de la intención con la que se haga, el propósito y el espíritu al hacerlo.

Comentario: La carta de Tito es una de las llamadas pastorales, por los consejos de Pablo sobre cómo pastorear una iglesia, Tito debía tener cuidado en todo lo que hiciera, aprovechar al máximo el tiempo, en una iglesia hay muchas actividades y cosas por hacer, todas importantes y la Biblia nos dice que aprovechemos bien el tiempo porque los días son malos (Efe. 5:16), el tiempo es el recurso más valioso con el que contamos, así que ese tiempo debía ser dedicado a buenas obras (v.8), que no sea una fe intangible sino real a través de obras. Algo en que no debía caer Tito era en cuestiones necias y genealogías, ¿porqué?, por que para

99

muchos judíos la genealogía tenía un valor muy importante, lo ligaban con la salvación, esto provocaba que se creara un estatus entre los que tenían una cierta genealogía y los que no, pero la salvación no se hereda, no es por árbol genealógico, no importa si se desciende de Aarón, Moisés, Abraham, etc., la salvación es por reconocer el sacrificio de Jesucristo en la cruz y vivir conforme a esa fe. Las genealogías fueron particularmente dentro del judaísmo del primer siglo un tema de continua discusión, pero Pablo lo simplificó diciendo que todo aquel que es de Cristo es del linaje de Abraham (Gal. 3:29), Juan el Bautista refutó la vanalidad de confiar en cierta ascendencia al decir que Dios podía levantar hijos a Abraham incluso de las piedras (Mt. 3:9).

Dice un dicho que donde hay dos judíos hay cinco opiniones, y es que es bien sabido que a los judíos les apasiona discutir sobre cualquier asunto referente a la ley o el judaísmo, los griegos no son para nada la excepción, eran bien conocidos por su palabrería y continuas discusiones, Tito se iba a encontrar con ambos frentes en Creta, pero él debía mantener el equilibrio. No tiene absolutamente nada de malo el discutir (en el sentido positivo de la palabra) sobre algún tema, y qué mejor cuando se trata de la Palabra de Dios, las discusiones enriquecen no sólo a los que son parte de ellas sino a los oyentes. Existen dos clases de discusiones, la positiva, en la que se busca una respuesta conjunta, una explicación, una aplicación y la negativa en la que se trata simplemente de destruir los argumentos del otro, en las que no existe un espíritu de cordialidad y humildad, era este tipo de discusiones sobre la ley las que debía evitar Tito, las que no llevan a ningún lado. Debía evitarlas porque con lo que Jesús interpretó y con lo que estaba escrito previamente era suficiente para entenderla, el resto vendría poco a poco con la guianza del Espíritu Santo. La Escritura nos dice que en parte conocemos y en parte profetizamos (1ª Cor. 13:9), no entender algo de momento no significa que debamos rechazarlo o que sea vano o no sirva. Tito no debía evitar discutir sobre la ley porque esta estuviese abolida, sino aquellas que no edificaban. La ley no era, ni es el problema en sí, el debate casi siempre era por cómo se debía interpretar y aplicar determinado mandamiento, por ejemplo, la celebración de la Pascua era objeto de discusión, cómo se debían realizar las bendiciones, en qué orden se debía beber el vino, etc., etc., y así con muchos mandamientos, era tal las diversas maneras de interpretar la ley que se perdía muchas veces el sentido práctico de la misma cayendo en establecer yugos y cargas pesadas de llevar para el pueblo. Hechos capítulo 15 es un buen ejemplo de discutir sobre la ley puede resultar edificante.

Vamos a pasar ahora al análisis de otros pasajes que tienen relación directa con la validez de la ley hoy en día y específicamente con nuestra dieta alimenticia. Pero antes de eso, es importante que no olvides que la ley no fue dada para ser salvos sino para vivir por ella una vez hechos salvos por la sangre derramada de Jesús en la cruz.

El asunto de los alimentos es un tema muy polémico y del que no nos gusta mucho hablar, por lo que es poco enseñado en las iglesias y partiendo de la premisa que la ley está abolida, incluyendo las leyes dietéticas, mucho menos. Es un tema que se resume generalmente diciendo “come de todo pero sin olvidarte orar con acción de gracias” o “come de todo ya que todo es lícito pero ten en cuenta que no todo conviene”. ¿En verdad la Biblia, Jesús y los apóstoles creían esto?.

En lo personal dudo que alguien pierda su salvación por comer algo que la ley prohíbe, quizá pierda la figura, la salud y su dinero en medicamentos, pero quizá no su salvación. Conozco a mucha gente que no lleva la dieta que prescribe Dios en la Biblia pero que tienen

100

un testimonio ejemplar, que buscan a Dios cada día y que con todo su corazón aman a su prójimo (7 reglas de interpretación: mayor-menor peso, pág. 20). No es la comida la que nos hace mejores o peores delante de Dios y mucho menos delante de los hombres. Más vale tener un corazón limpio delante de Dios que ser excesivamente meticulosos en lo que comemos. Las leyes dietéticas o de kashrut como se le conocen, son aquellas que se encuentran principalmente explicadas en Levítico 11 y Deuteronomio 14, y son antes que nada una forma de identificación entre los animales puros o impuros o aquellos que son aptos para el consumo y aquellos que no lo son. Fueron dadas por Dios para protegernos de las miles de enfermedades existentes en los alimentos. Estas leyes eran ampliamente conocidas por toda la sociedad hebrea no sólo “en tiempos del Antiguo Testamento” sino en el tiempo en que Jesús y Pablo vivieron. Una de las razones por las que Dios las dictaminó, no fue porque en ese tiempo no hubiera refrigeradores, sino debido a que por cuanto Él mismo nos hizo, Él mejor que nadie sabe como funciona nuestro organismo y qué puede ser dañino para nuestro cuerpo. El seguir una dieta conforme a la Palabra no va a garantizarnos al 100% que no nos enfermemos, pero yo si te aseguro, por que la Palabra dice que la obediencia a ella trae bendición, que serán menos las veces que te enfermes que comparadas con seguir una dieta “normal”. Son cientos o miles las personas que todos los días sufren de alguna infección o padecen malestar estomacal por ignorar lo que Dios les quiere decir sobre su alimentación. Qué triste que estemos más dispuestos a obedecer al doctor cuando éste nos prohíbe algunos alimentos que ha Dios. Al doctor no lo acusamos de fanático, judaizante o legalista pero si a aquellos que nos lo quieran decir por medio de la Palabra.

Tristemente aquellos que llevan o intentan llevar su fe “hasta la mesa” son vistos como esclavos o victimas del legalismo judío, cuando precisamente lo opuesto es la verdad. Libertad no es hacer lo que quiera, sino usar mi libertad para someterme a Dios y obedecer Su Palabra. Dios es nuestro Padre y como tal, quiere que sigamos “sus consejos”, pero su misericordia es tan, tan grande que a pesar de que durante muchos años los ignoramos no nos pagó realmente como lo merecíamos, incluso cuántas veces no nos sanó de enfermedades que pudieron ser evitadas. Pero es más triste que hemos subjetivizado a tal grado nuestra fe que se ha vuelto prácticamente intangible e invisible, cuando lo que afirman epístolas como Santiago, 1ª y 2ª de Juan es que nuestra fe se debe ver reflejada en acciones cotidianas, prácticas y simples como lo es el comer. ¡Hasta en la alimentación Dios nos ha hecho diferentes!, la alimentación de sus hijos no puede ser cualquiera cosa. Dios quiere ser el Señor de todas los aspectos de nuestra vida. Las leyes de kashrut son una evidencia visible de nuestra fe y de que Él ha escrito sobre tablas de carne su ley para que por medio del Espíritu andemos en la libertad que otorga andar en sus mandamientos (Sal. 119:44,45).

Quisiera que no pienses en dieta bíblica como aquella que forzosamente siguen muchos judíos ortodoxos, si bien ellos son los que durante siglos han mantenido lo más posible su obediencia a Dios en este punto, no quiere decir que ese sea el modelo a seguir, nuestro modelo a seguir es el único que debe haber: la Palabra de Dios. Por ejemplo ellos no comen mezcla de lácteos y carne, incluso los colocan en refrigeradores separados, aunque la ley no dice esto y sin embargo esto científicamente es más saludable, menciono este ejemplo, no porque esté en contra o considere que están mal quienes hacen esto, sino para que no caigamos en el extremo de seguir un estricto control alimenticio que quizá ni esté en la Biblia y se convierta en una carga o pensemos que deba de ser forzosamente así.

Se que el aspecto alimenticio es algo que incomoda a muchos y estoy consciente que miles de familias viven de ello y millones más dependen también, pero piensa en esto, muchas veces hemos afirmado haberle entregado toda nuestra vida a Dios, asegurado que Él es el

101

Señor de nuestra vida, declarado que ahora somos siervos (esclavos) de Cristo, pero cuándo se trata de aspectos tan arraigados de tantos años como lo es la alimentación nos resistimos a hacerlo, nos resistimos a obedecerlo y buscamos muchos pretextos para no hacer aquellos cambios para que Dios pueda seguir formando su carácter en nosotros o incluso hacemos otras actividades para justificar esa área que sabemos que debemos cambiar, porque sabemos que es más fácil ir a las reuniones de oración, servir en la escuela dominical o como edecán (lo cual es perfecto, no estoy diciendo que no se haga) que cambiar mis hábitos alimenticios. Si somos sus siervos, si somos sus hijos, si somos obedientes y queremos seguir creciendo espiritualmente, ora mucho sobre esta área y pregúntale a Dios si quiere que realmente sigas la dieta que está prescrita por el mejor “Gastrónomo” y “Nutriólogo” que puede haber. Que Dios nos libre de imponerle a alguien cargas que Él no le ha puesto a alguno de sus hijos. Su interpretación de la ley es fácil y su carga ligera (Mt. 11:29).

Que el análisis de los siguientes versículos despeje dudas y nos sirva para afirmar la validez práctica de nuestra fe en todas y cada una de las áreas de nuestra vida.

????  

Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

 

Tags: Mateo 11:13 Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan.

Mateo 11:13 Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan.

Interpretación tradicional: El cumplimiento de la ley llegó su fin con el anuncio de Juan el Bautista sobre la venida de Cristo.

Verdadero entendimiento: La ley no tiene su terminación en los días de Juan el Bautista o Jesús, este versículo se refiere al alcance de la ley no a su validez.

Comentario: El mensaje de Juan no terminó cuando éste o Jesús murió, profecías como las de Isaías, Jeremías, Ezequiel o Zacarías nos hablan claramente de un periodo posterior a la muerte y resurrección de Jesús aún en la ley. No todas las promesas dadas previamente (en el Antiguo Testamento, si tu quieres) se cumplieron en la primer venida del Mesías. El mensaje de Juan es de arrepentimiento y este sigue vigente como la ley y los profetas hoy en día, esto quiere decir que incluye el milenio, la era Mesiánica, sin embargo concluye al final de esto como lo indica 1ª Cor. 13:8. Si la ley y los profetas hubiesen terminado en los días de Juan, en dónde dejamos profecías como en las que un niño jugará junto a la cueva del áspid, que el león y el becerro andarán juntos (Isa. 11:6-9), las cuales son literales. Si nos quedáramos en el estricto sentido literal de este verso de Mateo 11, estaríamos frente a una contradicción a lo que previamente dijo Jesús en Mt. 5:18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. ¿Crees que ya se cumplió toda la ley y los profetas? Personalmente creo que no.

  *  Todas las citas tomadas de la versión Reina-Valera revisión 1960, excepto que se indique.

Trabajo realizado por Omar Morado de la Paz, basado en textos y estudios de R. Moshé Koniuchowsky, José Antonio Sánchez Vilchis, Diego Ascunce, Dan ben Abraham y Mijael Avila, con la colaboración de José Antonio Sánchez Vilchis, Omar Calderón Escalona, Froilán Jesús Neri Gómez, Daniel Calderón Escalona e Ivette Poumián Sagardi.

Dudas o comentarios: escribir a omarbiblia@amen-amen.net., moradoomar@yahoo.com.mx o consultar la página en internet www.aprendizajebiblico.org, en la que también está disponible gratuitamente este libro.

Tags: HECHOS

 

HECHOS 8:29

Seguidamente el autor trinitario de ese estudio dice lo siguiente:

También la Palabra habla que el Espíritu indica qué hacer, el Espíritu da órdenes específicas, una fuerza no haría eso; en Hechos 8:29 dice: “Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro”. Esto indica cosas que hacer. También en Hechos 13:2,4 y 20:28.

El argumento de ese trinitario es falso y ridículo. El hecho de que el espíritu santo hable eso no significa que sea una persona divina literal. Ya demostré que la sangre, la sabiduría, las piedras, los árboles, etc., también dice la

Biblia que hablan, y ninguna se esas cosas son personas literales, se trata simplemente de una personificación. De la misma manera en esos pasajes del libro de los Hechos se personifica al espíritu de Dios, que es el poder de Dios. El espíritu santo habla porque es el Dios Padre quien habla por medio de su espíritu, su energía. Esto es lo mismo que si yo digo: “la radio ha dicho que mañana va a llover”, sin embargo, la radio no es un persona literal, no es la radio quien ha hablado, sino una persona por medio de la radio. Lo mismo sucede con esos pasajes, es el Dios supremo, el Padre celestial, quien habla por medio de su espíritu, es decir, su energía TRANSMITE LAS PALABRAS DE DIOS EL PADRE, pero citar esos pasajes para enseñar que el espíritu santo es una tercera persona divina es una perversión satánica de la verdadera enseñanza de Jesucristo y de sus apóstoles, los cuales enseñan bien claro que

el espíritu santo es el poder o energía de Dios.

Pero no solo eso, la Biblia enseña que solo hemos de adorar al Padre celestial (Jn.4:23-24), tanto el Padre como el Hijo reciben gloria, honra y alabanza (Ap.5:13-14), sin embargo, LA BIBLIA JAMÁS ENSEÑA A ADORAR NI A GLORIFICAR AL ESPÍRITU DE DIOS, lo cual es la prueba más clara e irrefutable de que el espíritu santo no es Dios, ni es una tercera persona divina, pues si lo fuera, entonces la Biblia enseñaría a adorarle y a darle gloria. Yo reto a los herejes y falsos maestros trinitarios a que me den un solo pasaje de la Biblia donde se adore o se de gloria al espíritu santo. ¡¡Jamás lo encontrarán!!

Tito Martinez

Tags: